Al parecer el actor cobró mucho más que su compañera de reparto Michelle Williams.
Cuando salieron a la luz las acusaciones de abuso sexual contra Kevin Spacey, Ridley Scott decidió eliminar sus escenas en Todo el dinero del mundo y rodarlas de nuevo con Christopher Plummer encarnado al personaje. Según el director, ninguno de los actores -a excepción del propio Plummer, por supuesto- habría cobrado por estos ‘reshoots’. Una información que ahora desmiente USA Today, medio que se hace eco de un tremendo agravio comparativo en los salarios de Mark Wahlberg y Michelle Williams las otras dos estrellas del filme.
Fuentes cercanas al rodaje consultadas por la publicación estadounidense informan de que los representantes de Mark Wahlberg en William Morris Endeavor -una conocida agencia de talentos- negociaron una tarifa de 1,5 millones de dólares para que el actor participara en los ‘reshoots’. Michelle Williams, por su parte -también clienta de WME-, recibió aproximadamente 80 dólares por día, lo que suma menos de 1.000 dólares en total.
La información que había trascendido hasta el momento desde el seno del rodaje indicaba que los ‘reshoots’ habían tenido un coste total de 10 millones de dólares. Fue el propio Ridley Scott quien en el mes de diciembre explicó las razones: «El proceso de regrabación fue caro pero no tan caro como se pueda creer, porque todos ellos [los actores], lo hicieron a cambio de nada».
El declaraciones a USA Today, el cineasta comentó que «todos [los actores] vinieron gratis. Christopher [Plummer] tuvo que ser recompensado, pero Michelle [Williams] no». De la misma manera, Scott aseguró que el resto del equipo de la película, más allá del plano actoral, sí había recibido -«por supuesto»- los emolumentos correspondientes.
Kevin Spacey fue apartado de Todo el dinero del mundo cuando el montaje ya estaba terminado, a finales de noviembre del año pasado. Las acusaciones de varias personas por acoso y abuso sexual provocaron que Ridley Scott tomase la decisión de reemplazarlo por Christopher Plummer en el papel del multimillonario J. Paul Getty. Todas sus escenas fueron grabadas de nuevo en tiempo récord para que la cinta se estrenase en la fecha prevista: el 18 de diciembre de 2017.