Se trata de un trastorno en el que las personas buscan mejorar su apariencia.
Morelia, Michoacán a 6 de Agosto de 2018.- Tomarse selfies comenzó a popularizarse hace ya varios años, después vinieron los filtros, aquellos con el que el rostro se distorsionaba de manera divertida y fueron un boom. Actualmente hay varias aplicaciones que permiten esta opción, “disfrazarte” de personajes, poner ojos más grandes, caritas de animalitos e incluso afinar y aclarar el rostro.
Pues este abuso en el uso de filtros que mejoran la apariencia, está siendo ya catalogado como un trastorno, según investigadores del Boston Medical Center, quienes indican que las consultas de operaciones faciales para parecerse más a los filtros de Snapchat, han aumentado.
Los expertos indicaron que hasta el momento, este tema, conocido como un tipo de Trastorno Dismórfico Corporal (TDC), afecta al dos por ciento de la población y se clasifica dentro del espectro obsesivo-compulsivo.
En un artículo publicado en la revista JAMA Facial Plastic Surgery indica que el 55 por ciento de los cirujanos plásticos informó haber recibido a pacientes que desean lucir más como sus fotos con filtros de Snapchat.
Advierten de igual manera que lejos de ayudar a las personas, puede empeorar su TDC, por lo que recomiendan acudir con un psicólogo y de ser necesario a terapias.