Ante las declaraciones del gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles, de que hará todo lo posible por no entregar el gobierno, Alfredo Ramírez Bedolla, mandatario electo, aseguró que lo que le duele al perredista es perder el poder.
«Les duele profundamente que van a entregar el poder el 1 de octubre y eso es lo que muestra la desesperación que tienen», dijo en entrevista con Azucena Uresti, para Radio Fórmula.
Ramírez Bedolla aseguró que las acusaciones de Silvano Aureoles de que con su mandato regresará el «narcogobierno» es un tema totalmente falso y que no tiene ningún sustento «es un invento para abollar al nuevo próximo gobierno de Morena».
Asimismo, llamó al actual mandatario del estado a que se realice una transición de poderes muy tersa y una entrega-recepción como marca la ley para evitar confrontaciones.
«Esperemos que no haya huidas de funcionarios antes de la entrega de poder, ya que Silvano Aureoles podría hacerlo, ya no sé qué esperar de él», agregó el gobernador electo de Michoacán.
Ramírez Bedolla puntualizó que no buscará engancharse en las acusaciones que hace Silvano Aureoles, sin embargo, le pidió que acepte la entrega de poderes de manera ordenada, «porque lo que Michoacán quiere es tranquilidad y paz».
«Yo no tengo ánimos de venganza y revancha, yo quiero el bienestar del estado», mencionó Alfredo Ramírez Bedolla.
Destacó que desde que se le nombró gobernador electo de Michoacán, incluso durante la campaña electoral jamás recibió una llamada o mensaje de Silvano Aureoles, lo que le da tranquilidad con la honestidad con la que gobernará el estado.